Preparación del suelo: La Begonia Fresas prefiere un suelo rico en materia orgánica y bien drenado. Puedes utilizar una mezcla de tierra para macetas y musgo sphagnum para proporcionar una buena aireación y retención de humedad.

Plantación: Coloca la planta cuidadosamente en la maceta, asegurándote de que las raíces estén cubiertas con suficiente tierra. Evita enterrar el tallo de la planta demasiado profundo. Presiona suavemente la tierra alrededor de la planta para asegurarla.

Riego: La Begonia Fresas requiere un riego regular para mantener el suelo ligeramente húmedo. Sin embargo, evita el exceso de riego, ya que esto puede provocar la pudrición de las raíces. Verifica la humedad del suelo antes de regar y asegúrate de que el agua drene adecuadamente.

Luz y temperatura: Esta planta prefiere una luz brillante indirecta. Colócala en un lugar donde reciba luz filtrada a través de cortinas o cerca de una ventana orientada al este o al oeste. En cuanto a la temperatura, la Begonia Fresas se desarrolla mejor en un rango de 18-24 °C, evitando temperaturas extremas y corrientes de aire frío.

Cuidado adicional: La Begonia Fresas puede beneficiarse de una humedad adicional. Puedes colocar la maceta sobre una bandeja con agua y guijarros para aumentar la humedad alrededor de la planta. Además, recuerda eliminar las hojas amarillentas o marchitas para mantener la planta saludable y estéticamente agradable.

Con estos sencillos pasos, podrás disfrutar de la belleza de la planta de Begonia Fresas en tu hogar. Recuerda proporcionarle las condiciones adecuadas de luz, temperatura y riego para que crezca saludable y florezca. ¡Disfruta de tu nueva planta y su aspecto único de hojas parecidas a fresas!