Prepara una mezcla de tierra bien drenada y rica en nutrientes para plantar los esquejes. Puedes usar una combinación de tierra para macetas y turba para asegurar un buen drenaje. Humedece ligeramente la mezcla de tierra antes de plantar los esquejes.

Haz un agujero en la mezcla de tierra con un lápiz o un palito y coloca el esqueje en él. Asegúrate de que al menos un par de hojas quede por encima de la superficie del suelo. Luego, presiona suavemente la tierra alrededor del tallo para asegurarlo en su lugar.

Coloca los esquejes en un lugar cálido y brillante, pero evita la luz solar directa intensa. Mantén la tierra ligeramente húmeda, pero no empapada, regando con cuidado para evitar el encharcamiento.

Después de unas semanas, notarás que los esquejes comienzan a desarrollar raíces. Esto se puede verificar tirando suavemente del tallo. Si sientes resistencia, significa que las raíces se han formado.

Una vez que las raíces estén bien establecidas, puedes trasplantar los esquejes a macetas individuales o directamente al jardín. Asegúrate de proporcionarles un lugar con sombra parcial y protección contra vientos fuertes.

Mantén un cuidado regular de tus plantas de fucsia, incluyendo riego adecuado, fertilización ocasional y poda para promover un crecimiento saludable y una floración abundante.

Con paciencia y cuidado, podrás disfrutar de hermosas flores fucsias en tu hogar. ¡No dudes en experimentar con diferentes variedades y colores para crear un jardín lleno de asombroso esplendor!

Fuente: https://www.homiful.com