La misión arqueológica conjunta de la Universidad de Waseda, en colaboración con el Consejo Supremo de Antigüedades (SCA), ha desvelado una tumba excavada en la roca y una gran cantidad de artefactos que abarcan diferentes períodos históricos durante su actual temporada de excavaciones en la Necrópolis de Saqqara.
El descubrimiento “proporciona información valiosa sobre la historia de esta región”, afirmó Nozomu Kawai, jefe del equipo japonés.
Esta maravilla arquitectónica, que se cree que data de la Segunda Dinastía, cuenta con diseños intrincados y ofrece una visión de la artesanía de los constructores del antiguo Egipto. El diseño de la tumba y la cerámica descubierta en su interior sirven como marcadores importantes para comprender el contexto histórico de su creación.
Mustafa Waziri, secretario general de la SCA, dijo que la colaboración con la Universidad de Waseda ha resultado fructífera y ha revelado una tumba que añade un nuevo capítulo a la rica historia de Saqqara. “Los artefactos y entierros descubiertos ofrecen una ventana a las vidas de quienes vivieron en esta antigua civilización”, señaló.
Entre los hallazgos destacables se encuentran los restos de un entierro humano con una máscara de colores y otro entierro para un niño pequeño. Además, la misión descubrió entierros de las épocas tardía y ptolemaica, así como un ataúd mal conservado de la dinastía XVIII que contenía una vasija de alabastro bien conservada.
El tesoro de artefactos incluye dos estatuas de terracota que representan a la diosa Isis, una estatua de terracota de la deidad infantil Harpócrates, varios amuletos, modelos de cerámica y ostraca con inscripciones hieráticas.
Kawai dijo que la misión ha documentado todos los descubrimientos. “Esperamos descubrir más secretos del sitio arqueológico de Saqqara en las próximas temporadas, enriqueciendo aún más nuestra comprensión de esta área de importancia histórica”, afirmó.